Uno de los elementos más importantes que hay que tener en cuenta a la hora de gestionar un restaurante es la calidad del servicio al cliente que se ofrece.   Un buen servicio de atención al cliente incluye proporcionar un servicio cortés y rápido para satisfacer las necesidades de los clientes durante su experiencia gastronómica, lo que puede determinar que alguien se convierta o no en un cliente recurrente. En este artículo, analizamos por qué es importante un buen servicio de atención al cliente en los restaurantes y damos algunos ejemplos de un buen servicio de atención al cliente en restaurantes y consejos para conseguirlo.   ¡Comencemos!  

Presta atención a las necesidades de tus clientes

  Estar al tanto de lo que quieren tus clientes y ser capaz de adaptarte cuando no alcanzas sus expectativas te ayudará a tener más éxito.   En el comedor, compruebe cómo están los comensales visitando brevemente sus mesas para hacerles preguntas concretas sobre su experiencia.   Anima a los comensales a dejar sus comentarios y sigue de cerca los sitios de reseñas y las redes sociales. Responde a todos los comentarios con prontitud y trata una mala crítica como una oportunidad no sólo para recuperar a un cliente descontento, sino para mejorar tu negocio.   Incluso puedes realizar encuestas para obtener opiniones y ofrecer incentivos para animar a la gente a participar. Prueba a crear una encuesta gratuita en Google y publícala en las redes sociales o incorpórala a tu sitio web.  

Enfócate en la imagen de tu negocio

  La mayoría de los comensales no volverán a un restaurante sucio, ni visitarán uno que reciba malas críticas sobre la limpieza. Podrá sonar obvio, pero este es uno de los aspectos que requiere atenicón especial.   Mantén a tus clientes contentos con un personal bien cuidado, haciendo que los baños estén relucientes, recogiendo y limpiando a fondo las mesas antes de sentar a los nuevos clientes, y asegurándote de que los cubiertos estén limpios.   No olvides que la limpieza se aplica también a los pedidos para llevar y a los de reparto. Utiliza recipientes de tamaño adecuado, resistentes y con cierres herméticos, para evitar que se ensucien, y envasa siempre las salsas por separado.  

Afronta los errores con cuidado

  A pesar de tus mejores esfuerzos, habrá ocasiones en las que las cosas vayan mal o se cometan errores. Es importante mantener la calma y manejar la situación de la forma más profesional y rápida posible.   Haz todo lo posible por corregir el error y compensarlo de forma que demuestre a tu cliente que estás dispuesto a hacer lo necesario para que quede satisfecho.   Mejora la precisión de los pedidos   Para mantener a los clientes contentos, lo mejor que puedes hacer es entregarles justo lo que pidieron. Haz que los camareros se aprendan el menú a fondo y confirmen los pedidos antes de que se retiren de la mesa. Incluso puedes crear un menú digital en una tablet, de manera que se reducirán los errores humanos gracias a la tecnología moderna.   La implantación de estas guías en tu restaurante hará que tus clientes se sientan valorados y respetados, al tiempo que le ayudará a mejorar tu propia eficiencia.   Si te gustó este artículo, ¡te invitamos a compartirlo entre tus contactos interesados en la gestión de restaurantes!