Los alérgenos alimentarios son uno de los problemas más comunes (y graves, aunque no se hable tanto de ello) para la gran mayoría de los restaurantes actualmente. La gravedad de las alergias varía de persona en persona, pero en general, podemos decir con seguridad que las alergias a los alimentos implican un gran problema de seguridad alimenticia que debe ser manejado con extremo cuidado.
Globalmente, según un estudio, se estima que más de 250 millones de personas viven con alergias alimentarias; además, se estima que más de 3% de los adultos y hasta 6% de los niños mundialmente padecen alergias alimentarias.
Sin duda, como propietarios de restaurantes, este es un tema al que debemos tratar con prioridad. Teniendo como base la importancia de este tema, en este artículo hablaremos de los alérgenos alimentarios y pasos clave que puedes tomar para manejarlos de manera eficiente en tu restaurante.
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¿Qué son los alérgenos alimentarios?
Son ingredientes o compuestos que pueden encontrarse en alimentos que dañan la salud de las personas sensibles a ellos y pueden provocar reacciones graves en el sistema inmunológico de las personas.
Los alérgenos más comunes son:
- Frutos secos
- Huevos
- Productos lácteos
- Trigo
- Moluscos
- Pescados
- Soya
- Nueces
Aunque parecieran ir de la mano, la intolerancia a los alimentos es diferente a las alergias, ya que la intolerancia no involucra el sistema inmune del comensal y, por lo tanto, son menos graves; sin embargo, es necesario atender las necesidades de ambos casos con la misma seriedad.
¿Qué puedo hacer para manejar los alérgenos alimentarios en mi restaurante?
Aquí te compartimos 3 consejos para ayudarte a manejar los alérgenos de alimentos:
- Entrena a tu personal
La gestión de alérgenos depende de los humanos… y los humanos solemos cometer errores. Por eso, nuestra mejor opción es entrenar a todo el personal de nuestro restaurante, sobretodo aquellos que tratan directamente con los alimentos. Existen cursos útiles e información relevante en línea, pero lo vital es que entiendan la importancia de conocer sobre este tema y como puede, literalmente, salvar vidas.
- Evita contaminación cruzada
La contaminación cruzada sucede cuando un platillo se contamina accidentalmente con un alérgeno, al entrar en contacto con otro platillo que contiene dicho alérgeno. La contaminación cruzada puede tener graves consecuencias para tu restaurante; por eso, así como en el punto anterior, es importante entrenar a tu equipo sobre cómo evitar estas situaciones (como sanitización de áreas de cocina, lavado de manos continua, entre otros). En este punto, la comunicación entre los miembros de tu equipo es clave para evitar la contaminación cruzada.
- Invita a tus clientes a hablar sobre sus alergias
A veces, los comensales no avisan sobre sus alergias a los meseros, sobretodo los adolescentes y adultos jóvenes. Si tu restaurante no tiene letreros o etiquetas sobre los platillos con alérgenos, es mejor preguntar a cada comensal si sufre algún tipo de alergia alimentaria antes de tomar su orden. De esta manera, aquellos con alergias se sentirán seguros y en buenas manos y, muy probablemente, sigan regresando a tu restaurante.
¡Excelente! Hemos llegado al final de este artículo. Está claro que es un tema muy amplio, pero ahora, tienes la base para proteger a tus clientes con alérgenos alimentarios y continuar ofreciendo un gran servicio a todo tu público.
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